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Los Vegueros de Pinar del Río completan su esperado regreso a los playoffs

El novato Estéban Terry colocó el toque perfecto que les dio la posibilidad a los Vegueros de ubicar par de corredores en posición anotadora.


En el final del décimo capítulo, la situación era clave este sábado para los de casa en el parque Capitán San Luis: Un out, empate 4-4 en el score y dos corredores en base. La carrera de la victoria a 90 pies del plato, le abría las puestas de la postemporada a los “pativerdes”.


Con Lázaro Emilio Blanco entrando a la caja de bateo, quien había remolcado 12 veces la carrera del empate o la ventaja —el segundo mejor registro en el equipo—, los Vegueros dirigidos por el manager debutante Alexander Urquiola no sólo tenían la oportunidad de incluirse entre los ocho teams mejores ubicados de esta 60 Serie Nacional del béisbol cubano: En un contexto histórico aún más importante, Pinar del Río estaba a punto de regresar a los playoffs, después de cuatro campañas de ausencia.



Cuatro años, nueve meses y 30 días habían pasado desde que el shortstop mayabequense de refuerzo, Michael González, consumiera el último turno al bate de un jugador vistiendo el traje de los Vegueros de Pinar del Río en postemporada. Sin embargo, aunque el camino fue tan largo como 73 juegos y 612 innings en 126 días: Lázaro Emilio Blanco fue héroe otra vez y con elevado de sacrificio definió el regreso de los Vegueros a los playoffs.


El éxito por 5-4 mejoró a (41-32) el registro de victorias y derrotas de los “pativerdes”, pero al mismo tiempo se convirtió en uno de los más honorables tributos que podría brindarle el equipo al legendario artista detrás del home, Juan Castro, quien lamentablemente falleció antes de esta campaña.


Llevando su inolvidable número “13” en el uniforme, los Vegueros se colocaron este sábado en el sexto lugar de la tabla de posiciones, dejando atrás por el momento a Cienfuegos y Santiago de Cuba.


Aunque los Piratas de la Isla atacaron a Vladimir Baños con cuatro carreras (tres limpias) y ocho hits en cuatro innings —jonrón de Johnny Hardy fue clave—, un doble de William Saavedra le empató el juego 4-4 a Miguel Lastra en el final del sexto.


Del quinto en adelante, cuando Reilandy González sustituyó a Baños, el bullpen de los “pativerdes” fue impecable. González (3 IP), Frank Luis Medina (2) y Raidel Martínez (1) se combinaron para registrar seis ceros consecutivos, dejando a los Piratas con 3 hits en 20 veces al bate y cuatro ponches sin bases por bolas.


Ahora la disputa por el octavo boleto rumbo a los playoffs queda entre Santiago de Cuba (40-32) y Camagüey (41-34). Si las Avispas vencen en la serie particular a los Piratas de La Isla, los Toros quedarían eliminados.


Desde la derrota 8-0 en el Juego 7 aquel domingo 17 de abril de 2016, Pinar del Río no ha vuelto a disputar un juego de playoffs, por lo que acaban de romper su sequía más larga de la historia.


Con dos partidos pendientes, ambos contra Industriales, los Vegueros aún podrían alcanzar 43 triunfos, y ubicarse mejor de cara a los matchs de Cuartos de Final.


Después de obtener dos títulos y disputar tres finales en la pasada década, la clasificación de los Vegueros de Pinar del Río vuelve a ser el resultado de otra renovación.


Para enfrentar la postemporada, una vez más la dominante rotación de pitcheo de los “pativerdes” será la más poderosa de la liga, sobre todo tras las inserciones de los relevistas Raidel Martínez y probablemente el multi campeón en NPB (Liga Profesional Nipona de Béisbol), el cerrador Livan Moinelo.


Si la producción del bateo y el trabajo defensivo les responden a la altura esperada, no hay dudas de que los Vegueros serán un rival difícil de eliminar en la venidera postemporada.

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