top of page

La presión de los Cocodrilos


(Foto: Jefferson Delgado/John Vila, ACN)

Sí, no hay dudas: los Cocodrilos de Matanzas han estado lejos de repetir el demoledor impacto cuando iniciaron esta 61 Serie Nacional del béisbol cubano.


En sus primeros 10 partidos de 2022, Matanzas anotó 76 carreras y permitió sólo 27, producción que arrojó un impresionante diferencial de carreras de +49. Con el lineup ideal tras ver reforzado su roster desde el inicio, el manager Armando Ferrer contaba con uno de los equipos más competitivos de la temporada. ¿Recuerdas la columna que escribí en el Opening Day, titulada “Hasta que no se pruebe lo contrario”? Puedes volver a leerla, sobre todo ahora que la situación de los Cocodrilos ha dado un peligroso giro en las curvas finales de la temporada regular.


Sin Ariel Martínez y Yurisbel Gracial para comenzar esta 61 Serie Nacional, y luego la partida de Yadir Drake, Eduardo Blanco, Aníbal Medina, Joel Suárez y Armando Dueñas desde mediados de marzo, la complexión de los Cocodrilos ha batallado contra la inestabilidad en el resto del camino.


Por si fuera poco, Erisbel Arruebarena se perdió 22 juegos entre lesiones al inicio y luego del primer tercio de la campaña, y la dupla Yariel Duque-William Luis ha estado lejos de la producción que aportaron en la pasada 60 Serie Nacional:


Yariel Duque:


60 SNB: .358/.469/.534/1.003, 8 HR, 48 CI, 226 PA


61 SNB: .262/.376/.349/.725, 3 HR, 26 CI, 207 PA


Diferencias: .096/.093/.185/.278, 5 HR, 22 CI, 19 PA


William Luis:


60 SNB: .283/.376/.522/.898, 13 HR, 46 CI, 213 PA


61 SNB: .183/.330/.310/.640, 2 HR, 9 CI, 88 PA


Diferencias: .100/.046/.212/.258, 11 HR, 37 CI, 125 PA


Bueno, sí, literalmente: en la regresión de apenas dos bateadores, Matanzas ha perdido 16 jonrones y 59 impulsadas en comparación con la pasada campaña. A eso podemos sumarle que, Yasiel Santoya y Sandy William Menocal, quienes pidieron la baja de los Cocodrilos para jugar con Industriales, se han combinado para 19 jonrones y 84 remolcadas:


Duque+Luis: 5 HR, 35 CI

Santoya+Menocal: 19 HR, 84 CI


No intento decir que Menocal y Santoya habrían tenido esos números con los Cocodrilos. Habría sido bastante difícil, ya que probablemente no hubiesen jugado de titulares en 63 y 53 partidos, respectivamente, como lo han hecho con Industriales este año. No obstante, son apreciables las diferencias en el aporte a sus respectivos equipos. Ha sido notable cuánto les ha funcionado a Industriales la inserción de Santoya y Menocal, pero a la vez, cómo bateadores de la calidad de Duque y William Luis, probados en la liga, han sufrido una considerable caída de rendimiento combinado con lesiones.


Obviamente, esos no han sido los únicos problemas de los Cocodrilos. De hecho, me atrevería a asegurar que, si Arruebarena—registra 10 jonrones y lidera el equipo con 39 impulsadas—hubiese estado al menos 10 juegos más como titular, ahora los Cocodrilos no tuvieran tanta presión para clasificar a los playoffs. Sin embargo, sabemos que ese no es el caso, y que la inconsistencia ha calado quizás silenciosamente en el corazón del lineup yumurino.


Jefferson Delgado ha disminuido casi .100 puntos de OPS, de .912 en 2020-2021, a .830 este año, aunque ha compensado esa caída impulsando 13 veces las carreras del empate o la ventaja—solo una menos que en la pasada serie—. Javier Camero ha sido otro de los principales bateadores de Matanzas, aunque, tras aumentar a 25 la cantidad de corredores que ha encontrado en posición anotadora, su promedio de .333 se ha reducido a .262 en esta temporada.


Andrys Pérez aún no parece haber descubierto todo el potencial de su swing, y esto es lo cierto: no tiene jonrones en 235 apariciones en home, acumula solo tres extra bases y ha dejado esperando remolque a 84 de 103 corredores en posición anotadora. Julio César González ha sido un gran contribuidor defensivo, oportuno por momentos—ha jugado cuatro posiciones y fildea para promedio de .979—, pero acumula apenas .720 OPS. Yadil Mujica y Ariel Sánchez han completado excelentes temporadas, siendo parte decisiva de un lineup que exhibió este martes a cinco titulares con al menos .400 OBP.


Así es, realmente fueron pocos los lineups que pudieron darse ese lujo:


Bateadores con .400+ OBP (mínimo de 180 comparecencias)


CAV, 6

LTU, 6

GRA, 5

MTZ, 5

SCU, 5

CFG, 4

IND, 4

MAY, 4

IJV, 3

PRI, 3

SSP, 3

CMG, 2

GTM, 2

HOL, 2

ART, 1

VCL, 1


Está claro que la efectividad de Matanzas para generar probabilidades de carreras está probada. Entonces, ¿cuál ha sido el gran problema aquí? Producir. La presión que diariamente los bateadores de los Cocodrilos no han podido conseguir.


El error más común que se está cometiendo en la narrativa sobre “la sequía de producción” de Matanzas, no sólo tiene que ver con sus 13 jonrones menos en comparación con la pasada campaña. El problema, como hemos analizado aquí, está en la regresión de los bateadores de “clutch”. Además, ¿sabes qué?: Matanzas está promediando el mismo OBP de la pasada serie, .391. Las carreras por partido tampoco no han revelado una caída brutal, sólo de 5.7 a 5.5, pero he aquí dónde ambas líneas ofensivas han cambiado de rumbo considerablemente:


RISP (Promedio de impulsadas con corredores en posición anotadora)


60 SNB: .261

61 SNB: .235


Esa diferencia, quizás, ha sido la principal fuente de desvío de los Cocodrilos, quienes incluso ganando los seis desafíos que le restan en esta 61 Serie, terminarán tres juegos por debajo de las 44 victorias del año pasado.


En el béisbol, una fina diferencia en promedios como el descenso que ha sufrido la ofensiva de Matanzas para remolcar carreras, logra influir en una sorprendente cantidad de juegos. Y eso fue parte de lo que sucedió este martes, cuando los Cocodrilos no podían descifrar los lanzamientos de Yadian Martínez en el momento clave.


Matanzas embasó a 11 corredores, y solo pudieron anotar apenas tres carreras. No estoy culpando a la ofensiva como el único punto débil de los Cocodrilos, pero el respaldo no ha sido lo suficientemente bueno. Y esto es lo que expresan los números: fue la 16ta derrota de los yumurinos, donde el “ganador/oponente” anotó cinco o menos carreras. Ningún equipo ha perdido más juegos con esos marcadores combinados. ¿Puede haber una estadística más explícita para dar crédito al picheo de los Cocodrilos?


Luego de la derrota por 4-3 este martes en el estadio Nelson Fernández, Matanzas aún tiene posibilidades de clasificación. Eso sí, para acercarse a las puertas de los playoffs, tendrán que evitar un hipotético empate con Santiago de Cuba, Villa Clara o Camagüey, aunque tienen la ventaja de haber ganado la serie particular ante Holguín, Pinar del Río, Industriales e Isla de la Juventud.


Quizás esa semana los actuales subcampeones nacionales logren superar los éxitos que necesitan, y al menos dejen atrás la presión que los ha acechado durante toda la temporada regular.





Noticias

bottom of page