top of page

Está a otro nivel: Yaz, su regreso y la histórica temporada con los White Sox

Nunca me ha gustado absolutizar, pero obviamente, en la vida hay objetivos imposibles de alcanzar. Piense en alguno de ellos, como este: Yasmani Grandal logró su 22do jonrón de la temporada este domingo, agitando un cambio de velocidad de Jordan Lyles.



Ese fue el octavo bombazo de Yaz desde que regresó de la lista de lesionados el pasado 27 de agosto, y la cita imposible aquí, es que al menos este año no podrá alcanzar el récord de jonrones para receptores de los White Sox: Llegar a los 37 bambinazos que bateó Carlton Fisk a los 37 años en la temporada de 1985, cada campaña que pasa se convierte en un objetivo más difícil de alcanzar.


Grandal, de 32 años, se ha perdido más de 60 juegos esta temporada con los White Sox, la mayoría de ellos debido a lesiones. Sin embargo, aun así, su repunte ofensivo durante los últimos 18 juegos está colocando su impacto entre las mejores temporadas para cátchers de la franquicia.


Antes de irse de 4-1 este domingo en el éxito de los White Sox por 7-2 sobre los Rangers en Globe Life Field, estas eran las calificaciones de bWAR (Versión de Baseball-Reference.com) en la historia del equipo:


Sherm Lollar (1958), 3.7

Yasmani Grandal (2021), 3.4

Sherm Lollar (1959) 3.4

Carlton Fisk (1985), 3.3


Pero lo más interesante del ranking, fueron los requisitos que sólo han cumplido esos tres receptores en una temporada con los White Sox:


1) Al menos el 80% de sus juegos en la posición.

2) Un mínimo de 20 jonrones.

3) 50 o más bases por bolas.

4) 50 RBIs o más.


Aquí podemos apreciar dónde se ubicó cada cátcher en diferentes medidores:



Probablemente, ahora podamos responder una interrogante que pudiste tener al ver cómo Grandal está superando por 0.1 punto en bWAR (3.4 por 3.3) a Fisk, quien bateó 37 jonrones en 1985: El impacto de Yaz en los “resultados verdaderos”, además del OBP, slugging y OPS (.414/.523/.937) hasta ahora ha sido inalcanzable.


De hecho, Grandal terminó este domingo elevando su slugging de .523 a .531, tras abrir el marcador para los White Sox con su jonrón solitario a 369-ft por el rightfield en Globe Life Field. Ahora, en sus últimas 79 visitas a la caja de bateo, su acostumbrada disciplina en el plato se está combinando con el imparable breakout de su swing:


Tras su regreso: 10.1 HR%, 11.4 SO% & 17.7 BB%

Antes de lesionarse: 5.7 HR%, 26.0 SO% & 24.4 BB%

Diferencias: 4.4 HR%, -14.6 SO% & -6.7 BB%


Los resultados verdaderos lo dicen todo: 1) Más jonrones (4.4 HR%); 2) menos ponches (¡-14.6 SO%!); Y… esto es lo que sigue:


BA/OBP/SLG/OPS/ISO/BABIP


Tras su regreso: .371/.494/.806/1.300/.515/.326

Antes de lesionarse: .188/.388/.436/.824/.298/.189

Diferencias: .183/.106/.370/.476/.217/.137


Las diferencias que más resaltan están en el slugging, el OPS y el ISO (Poder Aislado), ¡puro poder!, ajustes unidos a lo que vimos antes: Menos ponches, más contacto y, aunque esas tendencias no garantizan el aumento del poder, en el caso de Yaz su swing sigue en total ascenso: Ha producido un porcentaje de 13.9 extra bases, 7.0% más que su 6.9% acumulado con 121 bolas puestas en juego antes de lesionarse.


Si Yaz mantiene este ritmo, aunque a los White Sox le restan 13 partidos, parece un hecho que su enfoque dejará varios récords históricos para la franquicia: Una temporada donde su línea de barra ofensiva va camino a superar sin contratiempos los .400s puntos de OBP, .500 de slugging y .900 de OPS. ¡Ya ha caminado más de 70 veces! Y, por su fuera poco, acumula más del 80% de sus juegos defendiendo detrás del home.


Sherm Lollar (1958) y Carlton Fisk (1970), icónicos cátchers en la historia de los White Sox.

Fisk logró un slugging de .488 en 1970, pero terminó con casi .100 puntos menos de OBP (.094), si comparamos su registro de .320 contra el impresionante .414 de Grandal. Los mejores registros de OBP (.367) y slugging (.454) de Lollar fueron durante su gran temporada de 1958, donde rubricó 3.7 bWAR en 1958, marcas que Grandal ha superado incluso antes de su impresionante regreso hace menos de un mes.


En caso de que te preguntes por qué A. J. Pierzynski no se encuentra en esta lista, he aquí las razones: Nunca cumplió con una temporada de al menos 50 bases por bolas. Su mayor registro fue de 28 en 2012, la única campaña donde también superó la marca de 20 jonrones (27).


Como escribí hace apenas semanas, este resurgimiento de Grandal ha sido una de las noticias más agradables que podrían recibir los White Sox, mientras se enfocan para desafiar cada reto en octubre.


(Foto: Yasmani Grandal/White Sox)




Noticias

bottom of page